La pequeña Petra fue construida en el siglo primero después de Cristo. En el lugar se encuentran canales de agua, un desfiladero el siq-al barid con una longitud de mas corta que el siq de «Petra la grande», fachadas esculpidas, relieves cincelados.
La entrada es más estrecha que el Siq de «Petra la grande».
Al final del cañón hace como de calle principal hay fachadas a ambos lados, un paso escalonado permite acceder hasta un mirador situado en un balcón natural sobre las montañas proximas.
El nombre árabe es Sik al-Barid, que significa el cañón frío, dado a que las elevadas paredes que la rodean hacen difícil que pasen los rayos del sol.
Lo mismo que en «petra la grande», se accede atravesando una garganta estrecha de 500 metros de largo conectando tres áreas abiertas que son más amplias en el mismo macizo de arenisca.
La pequeña Petra fue abandonada en el siglo VII tras un período de decadencia progresiva, y como pasó con «Petra la grande», cayó en el olvido.
El acceso en coche hasta la pequeña petra ofrece unas bonitas vistas panorámicas. Antes de llegar, una pista de tierra por la izquierda de las paredes de la entrada se dirije por el mismo camino que tomaban las caravanas, hasta una joya arqueológica desconocida para el gran público un asentamiento neolítico que data del 8.500 al 5.500 años antes de Cristo.
Se puede llegar en vehículo propio, en taxi o en el vehículo del propio guía en caso de contratar sus servicios. El precio del taxi no debería exceder los 10 -15 dinares y hay que tener en cuenta que debe volver a Wadi Musa vacío.
El desierto las temperaturas son muy variables. Frío intenso en invierno y calor sofocante en verano. Algunas cosas que se debe llevar.
La entrada a pequeña Petra es gratuita.
Ruben